Una mara es un laquel del norte de Centroamérica compuesta de grupos jóvenes delincuentes y pandilleros. Está involucrada en la delincuencia y la violencia y opera con una estructura de jerarquía clara.
La mara proviene del término callejero Mara, que significa `banda` o `pandilla`.
La mayoría de las maras se originaron en los países Centroamericanos como El Salvador, Guatemala, Honduras y México. Otra mara creada en la frontera entre México y Estados Unidos se conoce como la Mara Salvatrucha (MS-13).
Esta pandilla es una de las maras más conocidas en los EE.
UU.
y es algo temida debido a su conexión con el crimen organizado, el contrabando de drogas y la violencia. Estas pandillas se caracterizan por sus actividades criminales y violentas, y muchas de ellas han expandido sus actividades fuera de sus países de origen y han surgido en otros países sudamericanos, como Colombia, Argentina y Brasil.
La forma en que las maras se organizan y funcionan difiere de país a país, pero en su mayoría existe una estructura jerárquica y una cultura de violencia y competencia entre miembros de pandillas rivales.
En general, una mara es una organización criminal que opera generalmente dentro de pequeñas comunidades y usa la intimidación para asegurar la lealtad de sus miembros y el control sobre el territorio.
Los miembros de una mara usan armas de fuego, violencia y sobornos para controlar a la comunidad y obtener ingresos de actividades como el tráfico de drogas, el tráfico de personas, los secuestros y el extorsiones.
Uno de los principales problemas a los que se enfrentan muchas comunidades es el crimen y la violencia vinculados con las maras. También hay una creciente preocupación por la renovación urbana y la rehabilitación de delincuentes que han estado en contacto con las maras. La integración de miembros de maras en la economía formal a través de cursos de formación y empleo es clave para reducir los efectos negativos de la delincuencia organizada. Los gobiernos han emprendido una mayor colaboración con organizaciones sociales para apoyar programas de desarrollo comunitario y emprendimiento para ayudar a las personas a salir de las maras. Las maras han estado involucradas en la violencia durante muchos años y han creado una situación en la que muchas personas no se sienten seguras en sus propias comunidades. La lucha contra el delito organizado y la mara es un desafío al que los gobiernos locales, regionales y nacionales necesitan enfrentarse para garantizar la seguridad de las comunidades.