Cambiar el formato de un video puede parecer una tarea difícil, pero la realidad es que es más sencillo de lo que podemos imaginar. Realizar este procedimiento puede ser relevante por varias razones; quizás deseamos subir un video en una plataforma determinada que solo admite formatos específicos, o tal vez necesitamos ahorrar espacio de almacenamiento.
Sea por la razón que sea, te contaremos cómo cambiar de formato un video en unos sencillos pasos. Existen varios programas y aplicaciones disponibles en el mercado que proporcionan la funcionalidad de cambiar el formato de los vídeos.
Entre los más populares encontramos VLC Media Player, Adobe Premiere Pro, Final Cut Pro, HandBrake y Format Factory. Para ilustrar el proceso, en este artículo vamos a usar VLC Media Player, ya que es una aplicación gratuita, muy fácil de usar y que además se encuentra disponible para los sistemas operativos más populares como Windows, MacOS y Linux.
Primer Paso: Descargar e Instalar VLC Media Player Para comenzar, debemos descargar e instalar VLC Media Player en nuestro ordenador.
La instalación es muy sencilla y solo tienes que aceptar los términos y seguir los pasos que te indica el asistente de instalación.
Tercer Paso: Agregar el Video En la ventana que aparece, buscamos y seleccionamos el video que queremos cambiar de formato. Cuarto Paso: Elegir el Formato de Salida En la misma ventana, ahora debemos seleccionar el formato de salida de nuestro video. Hacemos clic en el apartado “Perfil” y de la lista desplegable, seleccionamos el formato que necesitamos. Quinto Paso: Guardar el Video ConvertidoFinalmente, seleccionamos el destino del archivo convertido pulsando el botón “Explorar”, después especificamos un nombre para el archivo convertido y hacemos clic en “Guardar” y finalmente en “Iniciar”.
El tiempo que puede llevar depende del tamaño del archivo original y la capacidad de procesamiento de tu ordenador. Una vez completada la conversión, ya tendrás tu vídeo en el formato que has seleccionado, listo para ser reproducido, subido a Internet o grabado en un disco. Con estas instrucciones y utilizando VLC Media Player, puedes hacerlo fácilmente y sin la necesidad de invertir dinero. Sin embargo, es importante recordar que la conversión de vídeo puede llevar a la pérdida de calidad, así que es aconsejable conservar la copia original del archivo por seguridad.
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