¿Añoras tomar unas aceitunas caseras, preparadas con recetas propias y servidas con una disertación estable? Si es así, entonces has venido al lugar correcto. Las aceitunas caseras son la receta perfecta para compartir con amigos y familiares, y si tienes un buen surtido de ingredientes, la cocción del mismo es bastante sencilla. Si estás cansado de la misma vieja aceituna preparada industrialmente, esta receta es una excelente alternativa cuando se trata de preparar una deliciosa acompañante para nuestras comidas.
Lo primero que necesitas es una buena cantidad de aceitunas.
Elígelas bien, y asegúrate de que se vean bien y no estén cubiertas de polvo, tierra o cualquier otro cuerpo extraño. La mejor manera de conseguir este aspecto es comprar aceitunas enteras en los mercados locales o en internet. Una vez que hayas comprado tu surtido de aceitunas, la próxima etapa es prepararlas para su cocción correcta.
Comienza lavando las aceitunas bajo agua fría para quitarlas las impurezas.
Luego, córtalas por la mitad de forma longitudinal.
Esto les permitirá absorber mejor el sabor del aceite y mejorar el resultado final de su cocción. Después de cortarlas, colócalas en un bol grande, y añade sal, orégano, ajo, curry, cúrcuma u otros condimentos a tu gusto. Esta mezcla ayudará a agregar sabor y sazón a tus aceitunas, al igual que una pequeña cantidad de aceite de oliva extra virgen. Al mismo tiempo, puedes pre calentar un recipiente apto para hornear a una temperatura de 160°C. Toma un recipiente apto para hornear, una bandeja forrada con una lámina de aluminio, y coloca las aceitunas cortadas dentro de la misma. Viérteles la parte superior con aceite de oliva extra virgen y luego perfora los pedazos con un tenedor. Esto ayudará a que el aceite se filtre dentro de las aceitunas mientras se están horneando. Hornea las aceitunas durante 25 a 30 minutos, o hasta que estén completamente cocidas, pero no llegando a estar quemadas. Esto es una buena señal, ya que indica que se está liberando todo el sabor que hay dentro de las aceitunas. Cuando la cocción esté completa, te recomendamos dejar que el recipiente se enfríe naturalmente antes de extraer las aceitunas. El resultado final es una mezcla nutritiva de texturas y matices que probablemente serán todo un éxito entre todos tus invitados. Incluso, si prefieres prolongar el sabor de tus aceitunas, puedes guardarlas en vinagre y aceite, para así poder servirlas durante varios días. Sea como sea, las aceitunas caseras no solo son una delicia para disfrutar, sino también una receta nutritiva y fácil de preparar. Si tienes, algún día, la oportunidad de recurrir a esta receta en tu cocina, no dudes en darle una oportunidad.