Las empanadillas son una comida llena de sabor que se prepara fácilmente.
La receta original se remonta a la época de los antiguos griegos, pero se han hecho variaciones desde entonces para adaptarse a los gustos modernos. Se pueden llenar de carne, verduras, pescado, queso, frutas y muchas otras cosas para crear deliciosas combinaciones. Se cocinan en un horno y, según el gusto, se pueden añadir condimentos y especias para darles un sabor único. Son fáciles de preparar, con la cocción durando entre uno y diez minutos dependiendo del tamaño de la empanadilla.
Básicamente, se trata de doblar una masa hasta formar una concha y luego añadir contenido.
Esta receta básica no ha cambiado mucho durante todos estos años.
Esta grasa debe ser suave para que se mezcle fácilmente con el resto de los ingredientes. La mezcla puede ser hecha a mano o con una batidora, dependiendo de si usted prefiere una masa manual o más fácil de trabajar. Una vez que la masa esté lista, rollela con un rodillo hasta que tenga un grosor de 3-4 milímetros. Por ejemplo, una receta para una empanadilla con queso necesitará algo para mezclarse con el queso, como espinacas, salchichas o cebollas, dependiendo de los gustos. Una vez que el relleno esté preparado, tome uno de los círculos de masa y sobrepóngalo encima del otro. Primero presione los bordes en la curva superior para dejar un pequeño pliegue de aproximadamente 2-3 milímetros. Luego sellar los bordes con un tenedor para evitar que se escape el relleno durante la cocción. El arsenal de ingredientes disponible para rellenar es prácticamente ilimitado, lo que le permite ser creativo y probar sabores diferentes.