Limpiar las juntas del suelo es una tarea sencilla pero de gran importancia, especialmente si tienes un suelo nuevo. Una limpieza periódica ayuda a mantener los suelos impecables, evitar que se dañen y minimizar la acumulación de polvo y suciedad. Limpiar las juntas del suelo no es una tarea complicada pero requiere un poco de espectacularidad. La primera parte de este proceso consiste en quitar toda la suciedad y la basura de los espacios de la junta. Utiliza una aspiradora para nivelar el suelo, pero debes también utilizar un cepillo para eliminar la suciedad de los espacios de la junta.
Una vez que hayas terminado, limpia las superficies con un paño húmedo.
Simplemente usa un paño ligeramente humedecido en agua limpia – no es necesario usar un detergente.
Si la suciedad acumulada es abundante, lavar con un detergente es una buena idea.
Una vez que la superficie de la junta esté limpia y seca, es el momento de sellarla. Esto le da resistencia adicional al suelo y evita que la suciedad y las partículas polvorientas se adhieran al suelo. Puedes adquirir selladores en la mayoría de los minoristas de suelos y materiales de construcción, como por ejemplo: Las tiendas Lowes, Home Depot o Carpet One. Si bien hay una amplia variedad de selladores disponibles, elige uno que es adecuado para tu tipo de suelo.
El proceso de sellado de las juntas del suelo no es difícil.
El tiempo de secado depende del tipo de sellador que hayas usado, así que lee con cuidado las instrucciones en el empaque (generalmente toma entre 1-3 horas para que el sellador seque por completo).
Después, puedes sellar los bordes del suelo con un sellador de color similar al de tu suelo para una mejor apariencia. Limpiar y sellar las juntas de suelos es una tarea sencilla pero esencial para la durabilidad y la apariencia del suelo. Así que si quieres asegurar que tu suelo esté siempre limpio, se vea bien y dure toda una vida, asegúrate de seguir estos sencillos consejos.