El Síndrome de Asperger (SA) es un tipo de trastorno del desarrollo que causa problemas para conectar a las personas con los demás y puede afectar el funcionamiento social, conductual, comportamental y cognitivo.
Es una forma de autismo de alta funcionalidad y un trastorno del espectro autista (TEA).
El SA se caracteriza principalmente por problemas de lenguaje y habilidades sociales e interacciones dificultosas con las demás personas. Los primeros estudios sobre el SA se realizaron durante los años 1930 y 1940 por el médico austriaco Hans Asperger. En 1981, el equipo investigador de Lorna Wing definió el SA como una forma de autismo de alto funcionamiento y lo introdujo al DSM-III.
Esto ayudó a establecer la condición como un diagnóstico reconocible.
Las personas con SA pueden tener dificultades para socializar, interactuar con los demás, expresar emociones o controlar sus comportamientos. El lenguaje y la comunicación pueden ser difíciles para una persona con SA, especialmente el lenguaje no verbal, como calado de tono, facialización y habilidades para comprender la comunicación no verbal.
A menudo, una persona con SA puede tener un vocabulario extenso y formalizado, una excelente memoria y un interés extremo en un tema en particular. Aunque el SA es un trastorno del desarrollo, los síntomas de la misma pueden variar entre individual y ambiental. Por ejemplo, algunas personas con SA pueden tener problemas para entender conceptos abstractos, por lo que pueden tener dificultades para entender la ironía o el humor.
Otros posiblemente se sentirían seguros con la tecnología avanzada o con algunas habilidades técnicas.
Algunos niños con SA pueden aprender a hablar temprano o con alguna habilidad, pero aún así pueden tener problemas para usar el lenguaje. Pueden tener dificultades para leer la pista social, a pesar de que comprenden el lenguaje verbal y las intenciones. Esto puede dificultar la interacción con otros niños, especialmente si su comportamiento es diferente de sus compañeros de clase. Estos adultos usualmente muestran un amor profundo y fiel de un área de interés en particular, lo cual a menudo refiere los temas escolares o trabajo relacionados con tecnología. Además, muchos adultos con SA tienen habilidades notables, como una gran habilidad para los números, el lenguaje o de memoria. Además de los síntomas comunes del SA, los individuos también pueden desarrollar problemas de salud mental e inesperados. Las líneas de ayuda telefónica, como la línea de ayuda autismo e Asperger, pueden ser de gran ayuda. Los terapeutas pueden ayudar a las personas con SA a trabajar en habilidades y herramientas sociales, expresión y comunicación. Además, los programas de educación especial para el TEA pueden proporcionar los recursos necesarios para ayudar a los individuos a lograr su potencial académico. En conclusión, el Síndrome de Asperger es un trastorno del desarrollo que puede dificultar la vida a las personas que lo presentan.