Breadcrumbing es una forma de comunicación moderna y modernizada que involucra a dos personas o más. Consiste en el intercambio de mensajes cortos sueltos o sugerencias esporádicas, que las personas se envían entre sí para mantener una forma de contacto.
Esta forma de comunicación no significa necesariamente una interacción profunda ni estable entre ambas.
Este término proviene del alimento tradicional, pan, y se usa para describir la comunicación parcial e indirecta entre dos personas.
Constantemente se considera como una forma de relación moderna.
Breadcrumbing tiene sus raíces en la era digital, especialmente en las redes sociales.
El propósito de esta práctica consiste en mantener a la otra persona interesada y esperando la continuación de la relación. A lo largo del tiempo, esta actividad puede acumularse hasta convertirse en algo más profundo, o resultar en una relación cero a cero. Aunque esta es una forma de comunicación relativamente moderna, hay constancia de actividades similares desde la antigüedad. Esto se debe al incremento de aplicaciones de ‘encuentros casuales’ y servicios de citas por internet, en donde la gente busca optimismo y compañía sin comprometerse seriamente. La práctica de breadcrumbing ha mostrado su popularidad entre las redes, especialmente entre la juventud y los adultos jóvenes que usan aplicaciones móviles y redes sociales. Breadcrumbing es una forma de relación poco comprometida, la cual consiste en envío y recepción de mensajes cortos hacia alguien con el fin de entablar una conexión. Esta conexión, a menudo, no llega a convertirse en algo más profundo, sino que se detiene en el plano de la amistad interesada. Esto significa que con breadcrubming, en función al mensaje enviado, se puede esperar sonrisas, mensajes entre líneas y diálogos fugaces, así como situaciones en las que la otra persona intenta interesarse en la agenda propia.
Aunque breadcrumbing ha existido durante un tiempo, el término se popularizó en 2013, al estar vinculado a comportamientos de envío de señales contradictorias entre dos personas. Esta práctica requiere la exclusión de algunas intenciones variables como el establecimiento de una relación seria, establecer una conexión sólida o conseguir un compromiso genuino. Lo que las personas buscan es principalmente mantener el interés de la otra persona con confusos mensajes textuales. A diferencia de los mensajes de texto ocasionales, el objetivo de breadcrumbing es mantener al otro interesado. Aunque puede parecer halagador el recibir mensajes cortos y recurrentes, muchas personas encuentran desagradable que alguien manipule sus sentimientos y los retenga en un limbo entre el ‘si’ y el ‘no’ por tanto tiempo.
Breadcrumbing se consigue a través de la constante comunicación: un mensaje aquí, una respuesta allí, una actividad en conjunto, una broma de vez en cuando. Esta forma de comunicación se caracteriza por una cierta ambigüedad, además de ser superficial y ocasional. Por lo tanto, las personas que están dentro de estas comunicaciones, deben decidir si quieren seguir con esta relación o si desean pasar adelante después de un tiempo.