La cecina es un producto alimenticio que se conoce desde hace varios siglos.
Se trata de carne salada y secada al aire en forma de tiras o lonchas.
Esta carne se come sola, pero también se usa en platos muy variados, como pizza, sándwiches, bocadillos, sopas, ensaladas, arroces y mucho más. Es una alternativa interesante para aquellos que quieren sentirse satisfechos en con sus comidas, pues es proteína de buena calidad y por sus características, se conserva por bastante tiempo. Originaria de la localidad española de Salamanca, pero común en toda España, la cecina es producto con muchas variedades para disfrutar de las mismas; se puede encontrar en diferentes sabores y es uno de los alimentos regionales más consumidos en la región.
Su proceso de elaboración es sencillo y consiste en seleccionar la carne de alguno de los músculos internos de un cerdo, bovino o cordero, se sala, se cubre con sal y se deja secar al aire libre.
Esta forma de secado es la que le da al producto un sabor salado, aromático y muy único. La forma de curar el producto varía según el lugar; en algunos lugares se refrigeran hasta que el producto adquiera la consistencia deseada, mientras que en otros se usa el sol para la curación.
En cuanto a la presentación de la cecina hay que decir que se trata de un embutido en forma de longanizas de carne salada y curada. El color de este productos dependerá de en qué parte del animal y cómo se haya preparado. Esto es debido a que algunas parte del animal tienen un color más claro, mientras que otras partes, como los muslos, tienen un color más oscuro. Su sabor es muy particular, salado, con un punto dulce, como el de un salami, sutilmente ahumado o crudo. Según el canal de partida de los animales, la comida de estos, la forma de salar, la conservación y el tiempo de descanso, el sabor puede variar. En la cocina española la cecina es usada en muchas recetas como el gazpacho, ensaladas, entrantes, sandwiches y como bocadillos. Esto se debe al sabor tan único que ofrece este producto, lo cual es perfecto para asociar con otros ingredientes. Esto también es bastante útil en la cocina por su larga durabilidad ya que se conserva por mucho tiempo sin acortar su sabor. En resumen, tomar en cuenta la cecina como parte de una dieta saludable es una buena elección ya que proporciona una amplia variedad de sabores y nutrientes a los platos. Es una excelente fuente de proteínas, grasas saludables, minerales y vitaminas, así como ácidos grasos esenciales.
Además, es un alimento bajo en calorías, ideal para aquellos que quieren controlar su peso.
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