El peting (pronunciado pay-ting) es una práctica de la cultura china de valorizar la riqueza cultural y comunicar la intención de vincular emocionalmente al personal con el patrimonio. Se trata de un intercambio no monetario a través del cual se transmiten conocimientos, tradiciones, creencias y costumbres. Esta tradición incluye varias prácticas que se han seguido en China durante siglos, desde antes de la dinastía Qin, y que están relacionadas con la cultura del regalo.
El peting es el intercambio de algo de valor entre dos o más personas.
El objetivo es demostrar aprecio y afecto, no un intercambio económico.
Los objetos ofrecidos son, en la mayoría de los casos, artículos de calidad superior, seleccionados para su símbolo de refrigerio,. Por ejemplo, un peting normalmente implica el intercambio de objetos como productos alimenticios, té, tela, especias, tablas de juego, joyas, porcelanas, alfombras y objetos de arte.
Estos objetos se conocen como ‘peters’.
A menudo, el destinatario del intercambio se promete a sí mismo devolver un peting cuando llegue la oportunidad. Esta práctica se considera un símbolo de gratitud y los receptores se sienten agradecidos por los regalos. Los donantes, al igual que los receptores, obtienen una profunda satisfacción al haber hecho un intercambio amable con alguien de su comunidad y profundizar su relación. Las prácticas de peting han desempeñado un importante papel en la cultura china desde hace siglos. Se cree que el peting nos ayuda a acercar nuestras diferencias culturales y sociales y, al hacerlo, se crea una comunidad más fuerte. En la actualidad, cada vez más empresas chinas ofrecen petings como parte de sus diseños de marketing. Estos petings pueden incluir folletos, tarjetas de presentación personalizadas, calendarios, cuadernos, libretas, tarjetas de felicitación, tarjetas de comida de regalo, calcomanías y otros regalos. Otra práctica común es ofrecer un mensaje escrito para 17 días consecutivos para mostrar gratitud durante la primavera china. En los últimos años, el peting también se ha convertido en un elemento importante de la cultura de la gratitud en el mundo occidental. Esta práctica se ha adaptado para ajustarse a las costumbres occidentales, como un acto de agradecimiento por la hospitalidad o los buenos deseos antes de emprender un viaje. Cuando se trata de fluir la richeza cultural, el peting es un intercambio valioso entre personas de diferentes culturas. Además, como el objetivo no es intercambiar bienes financieros, el peting promueve los lazos emocionales, la conexión y el respeto entre aquellos a quienes les interesa el patrimonio.