Las endorfinas son un grupo de hormonas producidas por nuestro cuerpo físico que tienen una variedad de funciones, incluyendo el control del dolor, el enfoque mental, la memoria a corto plazo, la lucha o huida y el placer.

Estas hormonas se liberan en respuesta a muchos estímulos diferentes, como el ejercicio, la comida, el humor y el contacto físico. En realidad, el término `endorfinas` fue acuñado en 1975 por los investigadores John Hughes y Jonathan Cross a partir de la palabra griega endon (dentro) y morphée (forma). El término se refiere a un grupo de hormonas de nuestro cuerpo que se unen a los receptores especializados en las células cerebrales y otros órganos para bloquear el dolor y aumentar el placer.

Las endorfinas tienen acción analgésica y sedante.

Bloquean directamente los mecanismos neuronales del dolor al unirse a los receptores de las células nerviosas. De hecho, el enfoque común para el tratamiento del dolor crónico es el uso de medicamentos que liberan endorfinas en el cerebro para proveer alivio antes de los efectos de la medicina.

En contraste, el enfoque farmacológico común para tratar el dolor agudo es el uso de analgésicos fuertes para bloquear el dolor. Los efectos de las endorfinas se sienten generalmente como una especie de bienestar general, aumento del ánimo y menos fatiga. En el ejercicio, se cree que las endorfinas influyen en la energía y el bienestar en general, mientras ayudan a regular nuestro nivel de fatiga durante el ejercicio.

Las endorfinas también se cree que ayudan en la recuperación muscular después del ejercicio.

Algunos atletas incluso creen que esta sensación de bienestar les ayuda en su rendimiento en la competencia.

Además del dolor y el ejercicio, las endorfinas también están relacionadas con el enfoque mental.

Algunos estudios incluso indican que una mayor concentración de endorfinas puede ayudar a mejorar la memoria a corto plazo. Otra función importante de las endorfinas es regular la respuesta de lucha o huida del cuerpo. Estas hormonas ayudan a mejorar el rendimiento, así como la resistencia al dolor o al cansancio durante el ejercicio o la lucha. Esto es particularmente útil para los atletas que buscan mejorar su rendimiento al enfrentarse a situaciones estresantes. Las endorfinas desencadenadas por la actividad física se cree que promueven una mayor satisfacción o placer al realizar actividades, así como el deseo de tener más contacto físico consigo mismo y con los demás.

Su papel en el cuerpo físico e influencia en el comportamiento humano está siendo ampliamente investigada.