El fumeiro es una antigua tradición culinaria portuguesa que se remonta a los tiempos medievales.

Se trata de una forma de ahumar carne y otros alimentos para conservarlos, a la vez que le infunden un sabor característico. Esta práctica se ha mantenido, aunque en los tiempos modernos hayan aparecido otras formas de conservar alimentos. Según la tradición, el fumeiro comenzó como un método para los pastores portugueses de la época para conservar los alimentos en las áreas rurales. La carne se ahumaba a fuego lento durante días, y el humo y la manteca de cerdo se usaban como una especie de sopa para humedecer todos los alimentos.

Esta sopa se conoce como banho-maria.

Todo el proceso se lleva a cabo en un lugar cercano al fuego, como un fogón de leña, un horno de barro o una barra especialmente construida para ahumar. Esta es la razón por la cual el fumeiro aún se considera una práctica artesanal, aunque los productos pueden ahora ser adquiridos en grandes almacenes. La carne que se ahumaba originalmente se guardaba en sacos de lana o de tela, los cuales estaban colgados de una viga para que los humos se infundieran en ellos. Esta carne ahumada se llamaba entonces «carne de alimpe» o «serra de alimpe» y se mantenía en buenas condiciones durante varios meses. Las carnes más utilizadas para el fumeiro son la cerda y el porco (salmpica y chorizo) así como el ternero, los cuales se marinan con ajo, sal, pimentón y aceite de oliva, mezclados con vino blanco o tinto.

Estas mezclas se guardan en los sacos de tela y luego se colocan en la barra para ser ahumadas durante al menos un par de horas. Es importante mencionar que el manejo correcto del fuego es un factor clave en el proceso de fumeiro. La temperatura del fuego debe ser lo suficientemente elevada para secar la carne pero nunca tanta como para quemarla. El humo debe estar lo suficientemente cerca como para darle sabor, pero al mismo tiempo, no tan cerca como para que la carne se queme.

Una vez ahumados, los alimentos ahumados se sirven de muchas formas.

El fumeiro y los alimentos ahumados son una parte importante de la cultura culinaria de Portugal y se disfrutan en todas las regiones de este país. Por esta razón, el fumeiro sigue siendo una parte importante de la cultura culinaria portuguesa, y es apreciado por personas de todas partes del mundo.