Un kibutz es una comunidad colectiva en Israel, única en su tipo, que fue tradicionalmente basada en la agricultura. El primer kibutz, llamado Degania, fue fundado en el año 1909 por un grupo de jóvenes judíos inmigrantes provenientes de Europa Oriental.

El nombre `kibutz` proviene del verbo hebreo `lekbetz`, que significa `reunir` o `coleccionar`.

Esta definición refleja la esencia compartida y colectiva de la vida de estas comunidades.

Los kibutzim, como se conoce a la pluralidad de los kibutz, fueron creados con un enfoque en el trabajo colectivo y la igualdad social, negándose a la existencia de roles capitalistas dentro de la comunidad.

El concepto de “del cada cual según su capacidad, a cada cual según su necesidad” adapta esencialmente las bases del socialismo en la organización de los kibutzim. Los miembros se distribuyen las tareas y responsabilidades, ya sea en la agricultura, en la educación, en la atención sanitaria, u otras áreas necesarias para el mantenimiento y la vida en el kibutz.

Al principio, los kibutzim se centraban principalmente en la agricultura, pero con el tiempo se han diversificado para incluir otras empresas industriales, y en algunos casos incluso se han convertido en lugares turísticos.

A pesar de los cambios que han sufrido los kibutzim, siguen siendo un componente fundamental de la vida y la economía de Israel. En un kibutz típico, los miembros no poseen propiedades privadas significativas ya que la mayoría de las necesidades son proporcionadas por la comunidad – incluyendo la alimentación, el alojamiento, la atención sanitaria y la educación.

En este sentido, uno de los rasgos más distintivos de los kibutzim es su énfasis en la vida comunitaria.

Las comidas suelen ser comunitarias, así como muchas de las actividades de ocio y culturales.

En cuanto a la educación, en los primeros años del kibutz, era común la educación colectiva, en la que los niños eran criados en gran medida por la comunidad en lugar de por sus padres.

Aunque esto ha cambiado en la mayoría de los kibutzim modernos, la educación y el cuidado de los niños sigue siendo una responsabilidad de la comunidad en su conjunto. Estos pueden variar desde la producción de alimentos o productos lácteos, hasta la manufactura de equipos electrónicos o la puesta en marcha de empresas de software. Muchos kibutzim también tienen instalaciones para el turismo y ofrecen alojamiento, alimentación y actividades diversas para los visitantes. Algunos críticos han señalado que los kibutzim han evolucionado para parecerse más a las sociedades capitalistas normales en las últimas décadas. Muchos han adoptado un modelo de `recompensa por méritos`, en el que los miembros que trabajan en puestos más difíciles o más especializados reciben una mayor remuneración. No obstante, a pesar de los desafíos y los cambios, los kibutzim han permanecido como una parte importante de la sociedad israelí. Siguen siendo un lugar donde las personas se pueden reunir y vivir juntas en comunidades igualitarias, centradas en el trabajo colectivo y la vida compartida. En conclusión, los kibutzim han demostrado una gran capacidad para adaptarse a medida que Israel ha evolucionado y se han convertido en un ejemplo inspirador de cómo una comunidad puede trabajar junta para garantizar la supervivencia y el bienestar de todos sus miembros.

Los kibutzim son mucho más que un tipo de asentamiento comunitario, son una forma de vida que encarna valores de igualdad, cooperación y trabajo en equipo.