La arribada es un fenómeno natural asombroso que involucra masas de tortugas marinas de cuello largo llegando a la costa al mismo tiempo en una migración pacífica. Estos reptiles acuáticos llegan a una costa común para realizar una misma actividad vital; para depositar sus huevos.
Es un evento sobre pasajero, pero sorprendente y conmovedor para aquellos afortunados que tienen la suerte de presenciarlo. El evento oscila desde el deslumbrante espectáculo del acto de procuración de los huevos, hasta el canto de las praderas de los pequeños recién nacidos que salen de los huevos. Durante una arribada, las tortugas de cuello largo nadan hacia la costa por la noche, durante la primavera y el verano para construir sus nidos. Mientras nadan, reconocen los impulsos magnéticos y el olor del agua para determinar el lugar correcto para desovar.
Los machos regresan al mar, pero las hembras eligen un lugar en la playa para cavar un nido con sus patas traseras. Una vez cavado el nido, las hembras empiezan a depositar los huevos, desovando alrededor de cien a doscientos huevos en un nido. A diferencia de los restantes reptiles, la mayoría de las hembras de tortuga de cuello largo regresan a la playa para desovar varias veces a lo largo del año. Esto significa que durante una temporada, importes numerosos de huevos pueden desovarse en una sola arribada de tortugas. Estas hembras regresan a la misma playa para desovar un promedio de tres veces al año, según la ubicación geográfica. Después de desovar, las hembras vuelven al mar a nadar activamente durante algunos días, antes de partir definitivamente. Esto ha llevado muchos investigadores a creer que las tortugas usan el olfato y la memoria para volver al mismo lugar a desovar. Los huevos de la tortuga de cuello largo mantienen los mismos requerimientos durante el desarrollo embrionario. En algunas partes del mundo, describe formidables tareas para asegurar la supervivencia de la especie a través de la arribada. Por ejemplo, hay grupos de rescate de arribadas que vigilan la playa durante el horario diario y combaten el tráfico y los depredadores. Es de especial interés que los nacimientos de arribada de las tortugas de cuello largo son más grandes que con las tortugas terrestres. Las hembras de tortugas terrestres generalmente desovan alrededor de treinta huevos a la vez, en comparación con entre cien y doscientos huevos echados por la tortuga de cuello largo. Esto significa que existe un mayor número de contratiempos para conservar a la especie durante la arribada, debido a la escasez de alimentos y oxígeno. A pesar de la presión que soportan las tortugas durante las arribadas, su número se mantiene funcionando de la misma forma. Para determinar los tamaños de su supervivencia a lo largo de los años, los investigadores han examinado los patrones de nalizamiento alternativo del mar, y descubrieron que hay muchos lugares diferentes que usan estas tortugas para desovar.
Esto significa que aunque haya una reducción en el número, los miembros de la especie de tortuga de cuello largo pueden moverse entre otros escenarios para mantener la especie, y su número se estabiliza.
En general, la arribada de tortugas de cuello largo es un fenómeno natural increíble y hermoso. La resistencia y el valor demostrado por estos animales para mantenerse a pesar de las amenazas, es una lección para todos nosotros. El hecho de que sigan viniendo miles de ellas año tras año es una eterna evidencia de la destreza y la determinación de la especie humana de mantenerla.
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