Las caries son una enfermedad que afecta los dientes.
Las caries son causadas por bacterias dañinas que se encuentran en la boca.
Se mezclan con restos de alimentos, saliva y otras partículas para crear una película llamada placa.
Esta película ataca los dientes y produce ácidos que destruyen el esmalte.
Una vez que el ácido ataca el esmalte, una lesión empieza a formarse en el diente. Al cepillarse los dientes regularmente, se desintegran los restos de alimentos, la saliva y algunas partículas. El uso de enjuague bucal también ayuda a prevenir las caries, ya que el alcohol se une a las bacterias y elimina los depósitos de placa. Además, los fluoruros y la ingestión de alimentos nutritivos ayudan a fortalecer el esmalte de los dientes. La deficiencia de vitaminas, el tabaquismo, el alcoholismo y la infección pueden debilitar el sistema inmunológico, haciendo que sea más difícil para el cuerpo defenderse de la placa bacteriana. Los más comunes son dolor de dientes, sensibilidad dental, problemas para masticar, oían fuerte, mal aliento y manchas oscuras en los dientes. Uno de los primeros signos de una caries es una pequeña depresión que se forma en el diente. Una vez diagnosticada la caries, el tratamiento dependerá del avance y la extensión de la lesión. El profesional de la salud bucal podrá recomendar la limpieza profunda, la cavidad, la obturación, el relleno o incluso la cirugía. Una vez que aparece, la enfermedad progresa lentamente y puede resultar en dolor y la pérdida de los dientes. La mejor manera de prevenir las caries es practicar una buena higiene bucal, comer alimentos nutritivos, usar fluoruro y visitar al dentista regularmente.