La neurodivergencia es un término cada vez más utilizado en la esfera de la salud mental y la psicología. Se usa ampliamente para describir a personas que tienen diferencias neurológicas significativas en comparación con la `norma` neurotípica socialmente aceptada. Aunque puede parecer una etiqueta más en la larga lista de términos de diagnóstico, en realidad, es más un movimiento destinado a desafiar las normas y eliminar el estigma asociado con estas diferencias.
La neurodivergencia fue un término acuñado por la comunidad del autismo como una forma de alejarse de las visiones patologizadas del autismo. Se basa en la premisa de que las variaciones neurológicas son una parte esencial de la diversidad humana y, por lo tanto, deben ser respetadas y aceptadas en lugar de ser tratadas como anomalías a corregir.
En la actualidad, el término se utiliza para describir una serie de condiciones, como el trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH), la dislexia, el trastorno del espectro autista (TEA), la bipolaridad, entre otros.
A menudo, las personas neurodivergentes tienen habilidades cognitivas únicas, que pueden resultar en ventajas en ciertos contextos. Por ejemplo, algunas personas con autismo tienen una atención extraordinaria al detalle y una memoria excepcional, características que son extremadamente valiosas en tareas que requieren precisión y exactitud. Sin embargo, también podrían enfrentar desafíos adicionales debido a sus diferencias neurocognitivas, incluyendo dificultades en la interacción social y la comunicación. La neurodivergencia se presenta de diferentes formas y, por ende, influirá de manera única en la vida de cada individuo. Algunas personas encuentran que la neurodivergencia tiene un impacto significativo en su vida diaria, mientras que otras pueden no notarlo tanto. Pero independientemente de cómo se manifieste, es importante entender que ser neurodivergente no es algo negativo, no es una enfermedad, ni tampoco algo que necesite ser `curado`. Al igual que con otras formas de diversidad, se trata de comprender y valorar las diferencias individuales.
El término neurodivergente ha sido elogiado por cambiar la narrativa alrededor de las diferencias neurológicas.
Ha permitido a las personas comprender que la diversidad neurológica no es un defecto, sino simplemente una diferencia. Elimina el estigma asociado con las `anomalías` neurológicas y aboga por la aceptación, el respeto y la igualdad para todas las formas de diversidad humana.
Además, el concepto de neurodivergencia desafía la percepción de que existe una `norma` neurológica.
Sugiere que, en lugar de tener un solo `tipo correcto` de cerebro, existen muchas variaciones diferentes, todas las cuales son válidas y necesarias para la diversidad humana. Este cambio de paradigma es crucial para fomentar una mayor aceptación y comprensión de las personas que son diferentes.
Sin embargo, la adopción del término neurodivergencia también ha sido objeto de críticas.
Algunos argumentan que, si bien mejora la percepción de las diferencias neurológicas, puede minimizar los desafíos reales que enfrentan las personas neurodivergentes. Puede que la neurodivergencia no sea una enfermedad, pero a menudo viene acompañada de síntomas que pueden ser debilitantes y que requieren un manejo cuidadoso y, a veces, tratamiento. La neurodivergencia también ha sido criticada por ser un concepto demasiado holístico, ya que agrega múltiples condiciones bajo un único término. Esto puede dar lugar a malentendidos y a la falta de consideración sobre las necesidades individuales de cada persona. En conclusión, la neurodivergencia es un término que ha surgido para desafiar la percepción normativa de cómo `deberían` funcionar los cerebros humanos. Es tanto una afirmación de la diversidad humana como un grito de guerra contra el estigma y la discriminación contra aquellos cuyas diferencias neurológicas los hacen únicos. Mientras que el término tiene tanto defensores como detractores, su uso está ayudando a impulsar una conversación necesaria sobre la diversidad neurológica y qué significa ser diferente en nuestra sociedad.
