La peritonitis es una infección grave de la membrana que recubre la cavidad abdominal y los órganos que la componen. Esta membrana se conoce como la membrana peritoneal y es una delgada capa protectora que separa el contenido del aparato digestivo y los riñones de la piel y los músculos del abdomen.
Esta membrana segregan líquido para lubrificar las paredes de la cavidad abdominal.
Esta infección puede desarrollarse transmisibles, es decir, a partir de una lesión de la piel, o no transmisibles, lo que significa que la bacteria ingresa a través del torrente sanguíneo desde el flujo y otros órganos y tejidos.
La peritonitis primaria no transmitida, es decir, la infección sin infección inicial, puede desarrollarse desde muchos orígenes: desde una cirugía abdominal o una lesión de pared abdominal hasta una úlcera péptica o una apendicitis.
Los síntomas comunes incluyen aparición rápida de fuerte dolor abdominal, vómitos repetidos, celulitis o signos de infección avanzada (fiebre, sudoración), náuseas severas, distensión abdominal hecha con vientre firme al tacto. En ausencia de tratamiento médico apropiado, la peritonitis primaria puede progresar en el tiempo y puede crear un riesgo de vida para el paciente.
Por lo tanto, el diagnóstico y tratamiento de la peritonitis primaria debe iniciarse inmediatamente.
Primero, el médico debe evaluar los antecedentes médicos y los signos y síntomas del paciente.
Una tomografía computarizada o una ecografía también pueden proporcionar información más detallada sobre los órganos internos y sus estructuras. Una vez que el médico haya diagnosticado la peritonitis, debe iniciar un tratamiento inmediato para prevenir complicaciones potencialmente fatales. El tratamiento primario para la peritonitis primaria no transmitida generalmente consiste en antibióticos para combatir las bacterias en la peritonitis. El médico puede prescribir una dosis intramuscular de un antibiótico en un solo día, según sea necesario. Las heridas penetrantes dolorosas resultantes de la peritonitis primaria a menudo se tratan con la aplicación de frío, cintas o vendajes para controlar la hemorragia. También puede ser necesario usar hemodiálisis, fístulas para drenar líquidos excesivos del abdomen y una dieta controlada para prevenir el aumento de la presión en el área afectada. La peritonitis es una infección potencialmente mortal de la cavidad abdominal si no se trata rápidamente. Por eso es importante que los pacientes con síntomas de peritonitis sean examinados por un médico lo antes posible y reciban tratamiento apropiado. El tratamiento para la peritonitis primaria generalmente incluye una dosis única de antibióticos, además de una dieta controlada para evitar la presión de los líquidos.