El tejido perinatal es una área de investigación clave que explora cómo una persona puede desarrollar una base sólida para la vida adulta segura y saludable. Para aquellos en medicina y ciencias de la salud, el tejido perinatal implica el estudio de los primeros momentos en la vida de una persona, desde el embarazo hasta los dos años.

Estos primeros días son críticos para el desarrollo temprano ya que pueden predecir el futuro desarrollo y bienestar de una persona.

La periodo perinatal comprende la concepción, el embarazo y los primeros dos años de vida.

Esta etapa temprana es crucial para el desarrollo de los individuos, ya que el ambiente en el que ocurren los estímulos es vital para el desarrollo sano de los niños. Una vez que un niño nace, la exposición extremadamente temprana a un ambiente estresante, positivo o negativo, puede tener efectos significativos a corto y largo plazo. Los estudios han demostrado que el entorno temprano puede cambiar la forma en que el cerebro de un niño se desarrolla. Una gran cantidad de estudios recientes se han centrado en el desarrollo de los primeros dos años de vida y su relación con la vida adulta. Se ha demostrado que los componentes ambientales, relacionales y biológicos del tejido perinatal tienen un efecto acumulativo en el desarrollo y el bienestar de la persona. Estos factores pueden incluir el tamaño y calidad de la familia, los recursos y el nivel de estrés, el apoyo económico, el conocimiento de los padres sobre el desarrollo infantil, el entorno cultural y los problemas de salud física y mental.

La importancia del tejido perinatal mejora cada vez más a medida que se descubren nuevos hallazgos, comprendiendo mejor la complejidad del desarrollo infantil. Además de los factores ambientales, relacionales y biológicos, hay una variedad de otras influencias en el desarrollo que pueden incluir el ambiente emocional de un hogar, la familiaridad con el lenguaje y la capacidad de procesar estímulos, la seguridad, la integridad corporal y la capacidad de autorregulación.

Además de comprender mejor el bienestar de los niños, el tejido perinatal también se ha centrado en la prevención, infraestructura y recursos proporcionados.

Los padres tienen un papel crítico en el desarrollo temprano de los niños.

Desde el embarazo hasta los dos años, los padres pueden ayudar a construir los cimientos de ese desarrollo saludable proporcionando un ambiente estable, seguro, positivo y saludable para el niño. Los avances en tejido perinatal han permitido a los profesionales de la salud y a los padres encontrar recursos para garantizar el mejor desarrollo temprano para sus hijos. Se están desarrollando programas y recursos específicos para ayudar a los padres e hijos a durante estos dos primeros años. Estos programas están diseñados para aminorar los efectos del estrés del embarazo y mejorar las relaciones entre padres e hijos. En resumen, el tejido perinatal se ha convertido en una parte fundamental de la investigación y el estudio del desarrollo temprano. Esta área de estudio avanzado también ha empezado a comprender los efectos a largo plazo en la salud y el bienestar de la persona, así como para crear recursos útiles para los padres en la etapa perinatal.

Aunque hay mucho trabajo por hacer, se espera que el potencial del tejido perinatal continúe impulsando el desarrollo temprano centrado en el bienestar a largo plazo de la persona.