Un shock anafiláctico es el tipo más severo de alergia, que puede ser desencadenado por alimentos, medicamentos, picaduras de insectos y ciertas plantas.

Los síntomas son muy ingeniosos, y el shock anafiláctico es una emergencia médica importante.

Los síntomas de un shock anafiláctico son muy variados.

Por lo general, comienzan con síntomas leves, como erupciones cutáneas, comezón, carrasperas, dificultad para respirar, dolor de estómago y la hinchazón de los labios, la lengua y la garganta. La hinchazón de los labios y la garganta puede hacer que sea difícil respirar, por lo que puede conducir a la pérdida de conciencia y la muerte si no se trata rápidamente.

Los signos y síntomas desaparecen generalmente entre 30 y 60 minutos después de recibir medicación de emergencia o inmediatamente después de que cesa la exposición al alérgeno que desencadenó el shock anafiláctico.

Desafortunadamente, aunque los síntomas pueden reducirse, pueden reaparecer si el alérgeno sigue siendo presente.

Un shock anafiláctico se puede tratar de inmediato con un medicamento que actúa rápidamente, llamado epinefrina. La epinefrina es un medicamento que se administra directamente en la arteria del antebrazo para contener los síntomas. Esta medicina ayuda a relajar y dilatar los vasos sanguíneos, ayudando a reducir la presión arterial y disminuir la cantidad de sangre que fluye en los tejidos. Las personas necesitarán un tratamiento con medicamentos para reducir la inflamación, reducir el riesgo de otra reacción y aliviar los síntomas de alivio. Si la causa fue una reacción a alimentos, medicamentos o picaduras de insecto, es importante identificar el alérgeno para evitar reacciones futuras, y el médico generalmente recomendará un kit de emergencia para prevenir reacciones graves.

Para poder reducir el riesgo de sufrir un shock anafiláctico, es esencial que los pacientes tomen precauciones. Esto incluye identificar y evitar los alérgenos desencadenantes, evaluar los medicamentos con el médico para verificar los posibles efectos conocidos sobre las alergias, mantener una dieta estricta, y tomar medicamentos recetados para alergias si fueron prescritos por el médico.

Costumbre de llevar un kit de emergencia de epinefrina que la persona puede usar si desarrolla una reacción alérgica repentina. Además, es esencial informarle a los profesionales médicos que atienden al paciente acerca de su alergia. Los shock anafilácticos son una emergencia médica muy seria y pueden ser fatales si no se tratan de manera oportuna. Afortunadamente, hay medidas preventivas disponibles para minimizar el riesgo de reacción, y la epinefrina es un tratamiento eficaz para los síntomas. Los pacientes que tienen alergias deben trabajar con su médico para planificar la atención adecuada, incluido el tratamiento de epinefrina para cualquier emergencia potencial.