Un toc es un trastorno de ansiedad caracterizado por manifestaciones repetitivas e incomprensibles.

Los conceptos relacionados generalmente se refieren a conductas no deseadas, como la obsesión compulsiva.

El trastorno obsesivo compulsivo, el trastorno de movimientos estereotipados o el trastorno del toque son algunos de los trastornos más comúnmente asociados con el toc, aunque también se pueden usar para describir la necesidad excesiva de tocar ciertos objetos, personas o animales.

Los síntomas del toc hacen que la persona se sienta obligada a repetir un conjunto de pensamientos, rituales o comportamientos cada vez. Estas conductas son diferentes para cada individuo, pero algunas incluyen cosas como repetir palabras o frases silenciosamente, realizar una serie exacta de movimientos o acariciar un objeto de manera compulsiva. También pueden implicar que la persona toque a otras personas o animales para calmar la ansiedad. Esta afección también se conoce como Conducta ritualista, y está clasificada dentro de los trastornos de ansiedad.

Es frecuente entre niños pequeños y adultos, pero se desconoce la causa exacta.

Muchos especialistas creen que el trastorno obsesivo-compulsivo, el trastorno de estrés postraumático u otros trastornos psicológicos relacionados pueden contribuir al toc. Esto puede ser cualquier cosa desde el estrés diario hasta el consumo de ciertos alimentos o la exposición a situaciones particulares. El tratamiento también puede incluir terapia conductual o farmacológica con un profesional de la salud mental. Esto comúnmente se logra mediante la exposición a situaciones desencadenantes en lugar de apartarse de estas. Los pacientes también se pueden enseñar técnicas de respiración y relajación para ayudarlos a controlar su ansiedad. El tratamiento farmacológico generalmente consiste en el uso de antidepresivos o antipsicóticos para tratar el toc. Algunas veces, la medicación se administra como una solución temporal mientras el paciente recibe tratamiento de terapia conductual para tratar el toc a largo plazo. Los trastornos de ansiedad, incluyendo el toc, son en general cambiantes, lo que significa que los síntomas pueden disminuir por sí solos con el tiempo. Esto hace que sea esencial recibir un diagnóstico profesional y empezar el tratamiento tan pronto como sea posible.