Esoterismo, un concepto derivado del griego «esoterikos» que significa «cerrado a la mirada», es una tradición filosófica o teológica que abarca un amplio abanico de disciplinas que incluyen desde magia, alquimia, astrología, algunas versiones de la teosofía, incluso temas más convencionales como la mística cristiana y el budismo.
Todas ellas tratan de ofrecer una explicación sobre los mecanismos internos, aunque a menudo ocultos, del funcionamiento del mundo, y se esfuerza por ofrecer una comprensión total de los misterios de la existencia humana.
Esta visión se remonta a la antigüedad, en la que los filósofos y religiosos pensaban que un conocimiento interior de la esencia del universo era la única forma de alcanzar la verdadera sabiduría, y desde entonces se ha transformado en una amplia jerarquía de disciplinas.
El esoterismo se basa, fundamentalmente, en la idea de que hay un conocimiento interno de la existencia humana que es profundo y significativo, pero últimamente oculto o olvidado. Esta sabiduría interna se revela, se supone, a aquellos que han llegado a estado de «iluminación» mediante una ardua búsqueda de conocimiento. Por lo tanto, el propósito último del esoterista es encontrar un conocimiento más profundo de la naturaleza del universo y la vida para revelar un nivel más elevado de cosas. Esta visión fundamental se extiende a las diversas ramas del esoterismo, desde el budismo hasta la alquimia, cada una destinada a revelar su propia visión de la realidad invisible. En general, el esoterismo se dirige hacia ciertos elementos de la religión, como la Biblia, la Kabala, los misterios egipcios y otros textos, como una base para la meditación, la reflexión y el descubrimiento interior.
El esoterista trata de interpretar algunos de los aspectos misteriosos de estos escritos, a través de la interpretación simbólica y teológica. Estas interpretaciones a menudo sugieren que hay un conocimiento esencial que se encuentra oculto en la profundidad de los misterios, y el objetivo del esoterista es encontrarlo. También se afirma que el esoterismo es una forma de buscar entendimiento usando una serie de herramientas no racionales, como la intuición, la visualización y la meditación. A diferencia de la racionalidad científica, el esoterismo enfatiza la capacidad de uno para conectar los misterios del universo a través de una conciencia interna en lugar de un análisis externo.
Esta experiencia multidimensional puede conducir a nuevos niveles de comprensión, algo que el motor de la explicación racional a menudo no puede ofrecer. Primarily, what sets esotericism apart from traditional religion is the degree to which a person’s own experience of the world heavily influences their personal truth. Esotericism doesn’t expect one to blindly accept a set of beliefs handed down by another, rather, it encourages a personal exploration into the depths of one’s own soul and being. Esoteric knowledge is meant to be found and applied to one’s own life and worldview, based on their own findings and expertly guided by a teacher who is an expert in the area.
Despite its rather mystical approach to inner knowledge, esotericism still has a great influence and relevance in modern society, especially in areas such as psychotherapy and anthropology. Esotericism functions as a bridge between ancient wisdom, modern science and religious tradition, providing a hopeful pathway to deeper understanding of our existence, our universe, and our relationship with the divine.
Esotericism can be a tricky realm to traverse, and one should always be sure to research regardless of who is providing the teaching. As always, taking responsibility and prudence into account is ideal when it comes to esoteric studies, and ultimately, the degree of one’s understanding is entirely up to their own willingness to explore.
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