La depresión es un trastorno del estado de ánimo a menudo relacionado con la angustia o el sentimiento de tristeza. Es un trastorno médico real y puede afectar su temperamento, su comportamiento, sus sentimientos, su pensamiento, su energía y su vida diaria.

A veces puede resultar difícil de identificar porque los síntomas no siempre son obvios.

Si bien la depresión es común en adultos, también puede presentarse en personas de todas las edades, incluyendo niños.

Aquellos que padecen depresión experimentan sentimientos intensos de tristeza, desesperanza y desamparo.

La seriedad de los síntomas varía de leve a grave, dependiendo de la persona y la situación. Los síntomas de la depresión pueden incluir prolongados sentimientos de tristeza, pérdida de interés en hobbies y actividades, fatiga y pérdida de energía, alteraciones del apetito, preferencia por estar solo, sentimientos de culpa y vergüenza, valoración baja de uno mismo, dificultad para concentrarse, insomnio o exceso de sueño, preocupación y ansiedad excesivas, y pensamientos de muerte o suicidio.

La depresión también puede abarcar trastornos físicos tales como cefalea, dolor de espalda y dolor abdominal.

En algunos casos, los síntomas pueden ser muy diferentes de los anteriores.

Si padece depresión, puede sentirse enojado, irritable o ansioso, sin tener que experimentar sentimientos de tristeza. Los síntomas a menudo duran semanas o meses, y pueden presentar una disminución significativa en la capacidad del individuo para afrontar su vida diaria. Los médicos pueden diagnosticar la depresión mediante la realización de una evaluación medica, realizar una entrevista con el paciente para obtener información acerca de los síntomas y los problemas, y evaluar la historia de salud mental y los antecedentes del individuo.

Para confirmar el diagnóstico, un profesional de la salud mental puede recomendar exámenes de laboratorio, radiografías o exámenes de resonancia magnética para descartar cualquier motivo médico que pudiera estar contribuyendo a la presencia de los síntomas.

Algunas personas se benefician tanto de los medicamentos recetados como de la psicoterapia, mientras que otros pueden preferir solo uno de ellos. A veces, la combinación de medicamentos y terapia química puede ser el tratamiento óptimo para algunas personas. Hable con amigos, familiares o un profesional de salud mental para obtener información acerca de los síntomas de depresión y de cómo puede ayudar a alguien que padece depresión. Las personas que padecen depresión deben consultar a su médico para obtener un diagnóstico preciso y recibir el tratamiento adecuado. Si bien la depresión es común, no significa que tenga que ser algo con lo que vivir.