A la hora de cortar el jamón ibérico, uno de los productos cárnicos más reconocidos y deseados de España, debe tenerse en cuenta el cuidado necesario para lograr un resultado óptimo.
El jamón ibérico es una delicia cárnica cuyo sabor y aroma se han difundido a través del mundo, y que agrada a todos los paladares. La principal clave para lograr cortes de la mejor manera consiste en un adecuado proceso de desmontaje, pues el jamón ibérico es un producto mucho más complicado de trabajar que otros tipos de productos cárnicos.
Aunque parezca sencillo, hay algunas técnicas básicas que es importante conocer si queremos preparar un manjar exquisito.
Lo primero que hay que hacer para empezar es conseguir unos utensilios adecuados.
Un cuchillo bien afilado y un taquero adecuado son indispensables para hacer los cortes correctamente.
El taquero es una especie de cuchara de tamaño grande, larga y ancha que se utiliza para apoyar la carne antes de cortarla. Esta herramienta es básica para trabajar con el jamón ibérico, pues algunas veces, debido a su flexibilidad, es difícil hacer los cortes adecuadamente sin el apoyo del taquero. Una vez dispongamos de los utensilios adecuados, lo siguiente es aprender la mejor técnica para cortar el jamón y asegurarse de que el resultado sea de la mejor manera. Lo ideal es realizar cortes delgados, con movimientos suaves y suaves, para mantener la integridad del jamón y no despedazarlo.
Si el cuchillo es bien afilado, esto será fácil.
Para garantizar el mejor resultado, es primordial tener en cuenta qué parte del jamón se va a cortar. El jamón tiene dos partes bien definidas: el paletilla, que es más carnosa, y la pierna, que tiene mayor cantidad de grasa. La primera debe cortarse de manera ascendente para evitar que se rompa, mientras que la segunda se recomienda cortarla en diagonal o en sentido contrario a la del pelo. Otra forma de conseguir unos excelentes cortes es marcar el jamón con algunos pequeños cortes antes de empezar a trabajar. Esto ayudará a delimitar los diferentes trozos de la pieza de forma clara y precisa, de manera que sea mucho más fácil trabajar con el jamón y conseguir unos cortes simétricos y uniformes.
Por supuesto, el cuchillo debe lavarse correctamente después de cada corte, para evitar la proliferación de microbios y enfermedades. Por otro lado, hay que recordar que el jamón ibérico no se debe cortar en trozos demasiado pequeños, ya que la grasa de este producto se viene abajo con facilidad y se pierde parte de su sabor.
Por tanto, es recomendable que los cortes sean lo más grandes posible para conseguir un buen resultado. En conclusión, la clave para hacer buenos cortes de jamón ibérico es tener los utensilios correctos, conocer las técnicas adecuadas y tener en cuenta la parte de la pieza que se va a cortar.
De esta manera, los gustosos cortes de jamón ibérico resultarán en platos de ensueño para deleite de tus invitados.