La erisipela o impétigo es una infección bacteriana cutánea altamente contagiosa que se presenta como una erupción con ampollas rojas en el tejido dérmico de la piel. Esta infección puede ser muy incómoda y dolorosa si no se trata a tiempo, aún siendo relativamente fácil de tratar. Esta enfermedad, a veces denominada impétigo, es comúnmente diagnosticada en niños afectados por la dermatitis atópica y en personas inmunocomprometidas. Comprendiendo la erisipela o impétigoLas lesiones cutáneas características de la erisipela son rojizas y suelen aparecer en la cara, los brazos y las piernas.
Estas provocan enormes picores y sensaciones de ardor.
Es fácilmente visible en la piel humana y es una forma diferente de erupción que usualmente se extiende por los pliegues de la piel, como el cuello, alrededor de la boca y el área de la barba en los hombres.
Las ampollas se forman bajo la superficie cutánea, típicamente iniciándose con enrojecimiento e inflamación local, y se desarrollan rápidamente en pequeñas ampollas hasta alcanzar tamaños de hasta un centímetro de diámetro cada una.
Estas ampollas suelen explotar fácilmente y suelen contener un trasparente fluido de pus que contiene bacterias. CausasLa erisipela generalmente es causada por la presencia de la bacteria estreptocócica o estafilocócica, que puede ser adquirida a través de heridas leves en la piel, como rasguños, cortes, arañazos, etc.
Las personas con sistemas inmunes debilitados son particularmente susceptibles a sufrir erisipela debido a los orificios de la piel. Este virus también se pueden transmitir a través de varias formas de contacto humano, incluyendo el contacto físico directo o el contacto con agua o superficies contaminadas. SíntomasLos principales síntomas de la erisipela incluyen la aparición de manchas rojizas que son especialmente visibles en el área de los pliegues de la piel. Estas manchas suelen ser extremadamente pruriginosas y con picores, enrojecimiento intenso y aumento de temperatura local. En casos más graves, estas lesiones pueden ser cubiertas de ampollas llenas de pus que se transforman en cicatrices una vez sanadas.
Estas lesiones se contagiaban gradualmente al resto del cuerpo, aún siendo altamente contagiosas.
Además, las personas con erisipela también pueden sufrir otros síntomas como fatiga, escalofríos y disturbios del sueño.
Diagnóstico y tratamientoLa erisipela se diagnostica después de una evaluación física de la piel.
Los médicos también pueden realizar pruebas de laboratorio para determinar si realmente se trata o no de una erisipela, usando técnicas como cultivo de piel y un examen con una lámpara de Wood.
En la mayoría de los casos, el tratamiento convencional consiste en el uso de antibióticos en una variedad de formas como ungüentos, suspensiones líquidas, pastillas, cremas y cápsulas. Los antibióticos se pueden usar por vía oral para tratar a los pacientes con infecciones bacterianas graves. Además, también se recomienda aplicar una crema hidratante o alguna otra crema para aliviar el picor. Además de esto, los pacientes deben asegurarse de mantener su piel limpia, seca y libre de bacterias para evitar el contagio de la enfermedad a otras personas y partes del cuerpo.
Si bien la erisipela puede ser dolorosa, en general es bastante fácil de tratar con los medios adecuados. Si se diagnostica a tiempo, los síntomas suelen desaparecer por completo en un periodo de 1 a 2 semanas, aunque los resultados pueden variar dependiendo de la intensidad y extensión de la infección.
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