El fentanilo (nombre comercial: Duragesic) es un tipo de opioide sintético extremadamente potente, alrededor de cien veces más potente que la morfina, elaborado a partir de la metilación del ácido N-fenil-N-propionil-piperidina-4-acoídico.

Es utilizado frecuentemente para tratar el dolor crónico intenso y severo, y también en anestesia.

Fue creado en 1960 y su patente fue otorgada a Janssen Pharmaceutica en 1962, aunque a finales de la década de 1970 fue introducido comercialmente como un anestésico intravenoso tal como la alfentanila.

Desde entonces ha sido utilizado como anestésico para la anestesia regional y epidural, analgesia postoperatoria y como medicamento para el tratamiento del dolor crónico en los años 1990.A pesar de su potencia, el fentanilo se ha utilizado con algunos éxitos en tratamientos prolongados del dolor crónico de algunos pacientes, especialmente aquellos que no pueden tolere o no tienen respuesta a dosis menores de opioides.

El fentanilo es uno de los medicamentos más potentes disponibles para aliviar el dolor crónico y, a diferencia de otras drogas opioides, se puede administrar por vía transdérmica, intramuscular y por endovenosa, entre otros.

El uso crónico del fentanilo puede provocar mecanismos de tolerancia, dependencia psicológica y física, y adicción.

Este último, a menudo se refiere como «abuso de fentanilo».

También se sabe que el abuso de fentanilo puede causar enfermedades graves, como síndrome de abstinencia, insuficiencia respiratoria, coma y muerte.El fentanilo también es vulnerable a la sobredosis, y los síntomas pueden incluir somnolencia profunda, disminución de la presión de la sangre, aumento de la presión del pulso, respiración superficial y apnea.

Si no tratados, los síntomas de sobredosis de fentanilo pueden llegar a ser fatales.

Actualmente, se está tratando de desarrollar un antídoto opiáceo que sea aún más efectivo que la naloxona para las situaciones de sobredosis. Sin embargo, mientras avanzan los experimentos, se recomienda que los usuarios de fentanilo se informen y comprendan los riesgos de sobredosis para reducir el peligro de abuso. En conclusión, el fentanilo es un opioide extremadamente potente, que se ha utilizado con éxito para tratar el dolor crónico severo. El abuso de fentanilo puede ser letal, y los usuarios deben estar conscientes de los riesgos y recibir educación sobre cómo prevenir la sobredosis de fentanilo.