La codeína es un medicamento farmacéutico conocido como un opioide narcótico.
Se usa para tratar una variedad de condiciones incluyendo el dolor leve a moderado, la tos y la diarrea. Se considera una forma más suave de opioide que se usa para tratar los síntomas relacionados con el dolor o la tos. Los efectos físicos de la codeína hacen que sea una droga de abuso y puede conducir a la adicción si no se usa de manera responsable.
La codeína se extrae de la planta de opio.
Esta planta, originaria de Oriente Medio y Turquía, producía una sustancia amarga que era curativa llamada opio. La codeína fue aislada por primera vez en 1832 por el farmacéutico alemán Friedrich Wilhelm Adams. Él descubrió que esta sustancia tenía propiedades medicinales que se podían utilizar para aliviar el dolor y la tos.
La codeína generalmente se receta como medicamento para el dolor leve a moderado.
Se usa para aliviar el dolor provocado por la artritis, lesiones deportivas, dolor postoperatorio, dolor muscular y neuralgia del trigémino. Algunos medicamentos para la tos también contienen codeína, por lo que también se utiliza para aliviar la tos crónica. Además, como antídoto contra el veneno de algunas serpientes, la codeína también se usa en medicina. La codeína es un opiáceo, una clase de drogas farmacológicas que genera un efecto relajante en el cerebro y el sistema nervioso central. Sin embargo, los medicamentos de venta libre contienen una dosis mucho más baja de codeína que los medicamentos prescritos. A pesar de que los medicamentos recetados con codeína contienen agentes químicos adicionales para reducir el riesgo de abuso, algunas personas toman cantidades excesivas de la droga para buscar una sensación de euforia o `subida`.
Si bien la codeína se puede usar para tratar el dolor y la tos, hay algunos riesgos potenciales asociados con su uso. Esto puede incrementar significativamente el riesgo de efectos adversos graves, como la depresión respiratoria, el coma y el paro cardíaco. Esta droga también está asociada con otros efectos secundarios menos graves, como mareos, náuseas y niveles bajos de energía. En conclusión, la codeína es un medicamento que se usa para tratar el dolor leve a moderado, la tos y la diarrea. Por esta razón, es importante seguir las indicaciones de un profesional de la salud al tomar este medicamento. Si cree que usted o alguien que conoce podría tener un problema con el uso de la codeína, es importante buscar ayuda inmediata para evitar efectos adversos graves.
